EL DIOS QUE YO CONOZCO

5.05. Relación entre el relato babilonio del diluvio y el relato bíblico

Las semejanzas son lo bastante estrechas como para garantizar que hay alguna relación entre el relato babilonio y el registro bíblico.

Se han propuesto tres teorías principales para explicar esta relación obvia:

(1) Muchos eruditos modernos pretenden que los judíos tomaron el relato babilonio durante el exilio y lo adaptaron a su propia manera de pensar. Esta es una teoría completamente inaceptable para los que creen que Moisés escribió el libro del Génesis, por inspiración divina, unos mil años antes del exilio.

(2) Unos pocos eruditos conservadores han sugerido una segunda posibilidad: que los babilonios podrían haber tomado el relato de los hebreos. Sin embargo, esta teoría no puede ser correcta puesto que las copias más antiguas del poema épico de Gilgamés son más antiguas en varios siglos que el período mosaico.

(3) El tercer punto de vista - fuera de duda la solución correcta del problema - sostiene que, en última instancia, ambos relatos procedieron de la misma fuente.

El relato de un diluvio universal con la liberación de una familia sobrevivió a muchas generaciones.

Cuando los babilonios lo consignaron por escrito, la narración había sufrido corrupciones debido a su transmisión oral y a la influencia politeísta del paganismo babilonio. Por otro lado, el relato bíblico fue redactado mediante inspiración y, por lo tanto, muestra el puro y elevado espíritu de un autor monoteísta.

Estos hechos explican las semejanzas y diferencias observadas en las dos narraciones. Puesto que la historia más antigua posterior al diluvio se realizó en la Mesopotamia, sus habitantes tenían un conocimiento mejor del diluvio y lo conservaron en una forma comparativamente más pura que las naciones que vivían lejos.

Es un hecho que fue consignado por escrito en Mesopotamia antes que en cualquier otra parte. Sin embargo, no es superior sino muy inferior al relato bíblico, como resulta evidente para cualquiera que lea y compare ambos.

En la tradición babilonia, falta casi completamente la fuerza moral de la narración bíblica. La Biblia nos da la historia; los babilonios cambiaron un hecho histórico convirtiéndolo en leyenda.